sábado, 24 de agosto de 2013

Del miedo y la esperanza

Durante los miles de años que dura nuestra historia los poderosos y gobernantes se han hecho con el poder y subyugado a los pueblos mediante el miedo. En un principio y todavía aún las religiones sirvieron como catalizadores de ese miedo para poder aplastar toda resistencia. Todo lo que iba en contra suya y de los intereses de Estado (Iglesia-Estado) era pecado por lo que el pecador ardería en los infiernos. La religión es una herramienta inventada con doble filo, pero todavía se usa para subyugar a los creyentes.
En un mundo cada vez más descreído y con menos valores espirituales tuvieron que inventarse otros temores, en las sociedades industriales el temor fue el desempleo, con el que actualmente juegan con todos nosotros.

Pero no os creáis que ellos no tienen miedo, tienen miedo a que nos unamos, de ahí el descrédito continuo a los sindicatos, que aunque en parte lo han hecho fatal en las últimas décadas, no dejan de ser un referente en la Lucha Obrera. Han estado modificando leyes para que no podamos reunirnos en la calle más de cierto número de personas (me recuerda a ciertas leyes franquistas, primos hermanos, vamos). 

El peligro lo tenemos encima y han conseguido utilizar el cuarto poder (MEDIOS DE COMUNICACIÓN) en nuestra contra para manipular las opiniones de la masa con pseudo científicos o pseudo super economistas, que lo único que tratan es de meternos en la cabeza que PRIVATIZAR es fantástico o QUE LA CULPA DE TODO ES DE LA POBLACIÓN.
Falsedades que delante de un público crítico no tendrían peso y caerían por si mismas, pero gracias a todas las leyes ANTIEDUCACIÓN que han ido y venido a lo largo de la democracia ESE ESPÍRITU CRÍTICO brilla por su ausencia y nos encontramos ante gran cantidad de ZOMBIES que inundan nuestras casas, lugares de trabajo y ciudades enteras.
No es complicado de comprender que toda gran compañía multinacional, o pequeña empresa recibe gran parte de sus beneficios gracias a sus trabajadores. SON EL CAPITAL SOCIAL de una empresa y por ellos la empresa existe. Se valen de estrategias divisorias y del miedo a la pérdida del trabajo para oprimir a sus trabajadores. Pero la idea común de todos debe ser otra. UNIDOS TODOS, la empresa siempre cede. Es difícil llegar a ese punto, como ya decía antes la misma empresa compra a sus seguidores y mete a los lobos dentro del corral. Para que entre los trabajadores haya muchos JUDAS y traicionen a sus compañeros. Fomentan la división permitiendo o muchos sindicatos o "comprando" los favores de alguno de ellos. Comprando con baratijas o con la posibilidad de que se puedan colgar alguna "medallita" que en la mayoría de los casos está muy, muy envenenada.

En el caso de la población en general la estrategia de los gobiernos es la misma. Si no existe ningún temor en la sociedad, lo inventan. Para luego hacer alarde en la mayoría de los casos de su incompetencia. 
En el caso de España hemos hipotecado nuestro futuro a favor de los bancos con un déficit del 10,8 gracias al rescate que Rajoy regaló a gran parte de la Banca. No nos creamos que era necesario, ese dinero si se hubiera utilizado para crear empleo, para las familias necesitadas hubiera rescatado a la banca pero de otra forma. Lo que pasa que la banca seguiría sin tener "Cash" para seguir operando de forma especulativa y no interesaba entonces rescatar a su pueblo. Ese que por desgracia todavía no le repudia, a él y todos los que son como él de cualquier signo.
La verdad es que pienso y sólo se me ocurre que si el objetivo de todos los ciudadanos de este país es el mismo, tendríamos que cambiar el chip y pensar que el bienestar del vecino está relacionado con el nuestro. Nos han manipulado de tal forma que ahora sólo NOS IMPORTA nosotros y lo nuestro. Pero nada más lejos.

En un barrio vive mucha gente diferente y tiene diferentes trabajos. El barrendero limpia las calles por donde pasamos y logra que estén impolutas (ahora ya no), para que no existan riesgos de insalubridad en la vía pública. Los jardineros cuidan de los espacios verdes que inundan la geografía de nuestra capital y son el pulmón de Madrid, sin sus cuidados estría todo o selvático o seco. El taxista le gusta ver esos jardines por donde lleva a sus clientes y pasear con su mujer por las calles de su barrio limpias. El arquitecto necesita del fabricante de material para construir sus sueños hechos en papel, pero pasea también por las calles por donde se cruza con el taxista. Todos tienen trabajo y compran en las tiendas de su barrio, con las aceras limpias y los árboles dándoles la sombra tan preciada en verano.
Todos vivimos en una infinita tela de araña conectados de una forma u otra. Todos somos responsables de todos de alguna manera. Las familias que tienen todos los miembros en paro dejan de comprar en la tienda habitual de ropa de sus calle y compran baratijas fabricadas en China. Entonces la tienda de su barrio, vecina de toda la vida debe cerrar y otra persona al paro. Arrastrando con ello a los fabricantes de esas prendas y los que crean los tejidos para las mismas.

El beneficio rápido y el hedonismo. El egoísmo extremo y la falta de valores. La sociopatía política está convirtiendo esta sociedad en una DISTOPÍA sin antecedentes.
Aún tengo la esperanza, una increíble ESPERANZA  de poder hacer ver que UNIDOS tenemos parte del camino ganado. DEJEMOS FUERA TODAS NUESTRAS DIFERENCIAS, son parte de nosotros, pero no de nuestro fin. VOLVAMOS LA CARA A NUESTRO VECINO, miremos a los ojos. Tenemos que darnos cuenta que todos caminamos el mismo camino. 



ESE CAMINO QUE QUIEREN DINAMITAR.
ELLOS QUIEREN QUE TENGAMOS MIEDO. PERO TAMBIÉN DEBEN TENERLO ELLOS.
SU MIEDO,NUESTRA ESPERANZA.
MAS UNIDOS,MAS FUERTES.

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